Iván Castellón Quiroga, Director Museo Nacional de Arte

El Museo Nacional de Arte, dependiente de la Fundación Cultural del Banco Central de Bolivia, se complace en inaugurar esta muestra de Walter Solón Romero, en conmemoración a los 100 años de su natalicio, que fue el 8 de noviembre de 1923, en Uyuni.

Walter Solón Romero fue uno de los exponentes más destacados del muralismo boliviano de la segunda mitad del siglo XX; estudió muralismo en Santiago de Chile, donde aprendió el manejo de la pintura al fresco. Viajó a México, allí se relacionó con los grandes muralistas de la Revolución Mexicana: Orozco, Siqueiros, Juan O’´Gorman, de quienes aprendió el uso de la piroxilina y otros materiales contemporáneos. Viajó por varios meses a la Unión Soviética y a varios países socialistas de entonces, donde pudo apreciar el arte monumental instalado en espacios públicos. Viajó a China y Japón donde indagó sobre el manejo de técnicas pictóricas asiáticas antiquísimas. También recorrió la India y los países del Medio Oriente. En esos viajes pudo apreciar distintas culturas y pueblos, especialmente diferentes expresiones del arte monumental y del muralismo, que en conjunto expresan un propósito: realizar arte en espacios abiertos y en entidades públicas, con temática histórica, social y popular para interpelación y disfrute de las grandes masas que no suelen ingresar a los museos.

Sus primeros murales los trabajó en Santiago de Chile y luego en Sucre, Bolivia, con el grupo Anteo, que fue creado por Walter Solón con la participación de su hermano Goyo Mayer (así se autodenominaba), Donato Mostacedo y los hermanos Jorge y Gil Imaná; luego se sumaría Lorgio Vaca. En el grupo Anteo participaban además otros cultores del arte con los que tenían sesiones lúdicas y resonantes contra la moral dominante sucrense.

Walter Solón también desarrolló otras técnicas. Cultivó el grabado, el tejido, el retablo y la pintura de caballete. Para este último apeló a diversos materiales pictóricos: piroxilina, duco, óleo, acuarela, témpera y tinta; que los ejecutaba en distintos soportes: tela, madera, cartón, papel amate de procedencia mexicana y materiales mixtos.

En esta exposición en homenaje al natalicio de Walter Solón, que el Museo Nacional de Arte la acoge, se tiene ‒en la Sala Previa‒ la bien conocida serie de dibujos a tinta: El Quijote y los perros, que constituye una marca “Solón”, un símbolo de denuncia contra las dictaduras militares, particularmente contra las dictaduras de Banzer y de García Meza, lo que le causó el exilio. La denuncia de Walter Solón contra esas dictaduras, en la que pone de relieve lo más sublime y simbólico de las luchas nacional populares, hace que su obra sea eterna y universal, de manera que la denuncia contra las injusticias y las dictaduras militares que reaparecen periódicamente, esté tan vigente hoy como ayer.

En la Sala Diez de Medina se tienen textiles, grabados, tintas, dibujos y piroxilinas. Probablemente al influjo de sus viajes y estadías no menos prolongadas en Europa y Nueva York, Solón nos ofrece en esta sala obras emparentadas con el expresionismo alemán y el cubismo de la primera mitad del siglo XX; así también con el action painting y el minimal art de la segunda mitad del siglo XX y, reafirmando sus raíces andinas, nos presenta obras indigenistas en textil y pintura piroxilina.

Las tintas parafrasean al expresionismo abstracto esparcido por Pollock, pero también a la tinta china. Algunos dibujos sobre figuras andinas tienen la factura del minimal art. Los grabados son de un trazo expresionista inigualable y, como toda obra social, tienen el propósito de interpelar al observador, de enrostrarle aquellos hechos que, como humanidad, aún no hemos terminado de resolver: el hambre, la injusticia social… Los dibujos refuerzan la temática social acerca de los presos y torturados que Solón los representó con el Quijote, pero también con hombres y mujeres de pueblo.

Lo dicho hasta aquí sobre la obra Walter Solón Romero es una reseña breve de lo grandioso que tenemos en este evento. Sin duda, que esta muestra sintetiza la vasta producción plástica de Walter Solón, principalmente en su faceta de dibujante, de grabador, de tejedor y de pintor de caballete.

Muchas gracias a la Fundación Solón por la iniciativa de conmemorar el natalicio 100 de Walter Solón Romero y por contagiarnos su espíritu reflexivo en torno a este artista trascendente en la historia del arte nacional.

La Paz, 8 de noviembre de 2023.